Aunque probablemente has oído hablar de esta semilla desde hace poco, la chía es un alimento tradicional en diversas poblaciones.
Las semillas de chía fueron utilizadas por los aztecas y los mayas como uno de sus principales alimentos —de hecho, «chía» es una palabra maya que significa fuerza—. Estos granos eran consumidos para aumentar la energía y la resistencia durante las largas jornadas de trabajo.
Su popularidad ha crecido en los últimos años debido a sus múltiples propiedades y beneficios para la salud, entre ellos, la pérdida de peso. En total, 28 gramos de semillas aportan tan solo 137 calorías al cuerpo, además de que favorecen el control del hambre en tanto producen sensación de llenura.
Las semillas de chía son, asimismo, fuente de fibra; una cucharada proporciona 19 % de la fibra que se recomienda consumir al día. Estas también aportan antioxidantes, proteína, ácidos grasos como omega 3 y 6, calcio, hierro y magnesio. Una cucharada de 15 mililitros proporciona entre 7 % y 9 % de la cantidad de minerales sugerida para ingerir por día.
Incluir semillas de chía en una dieta ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y reducir el colesterol, los triglicéridos y la presión arterial, por lo menos, así lo indican los estudios de la Academia de Nutrición y Dietética de Estados Unidos. Incluso, desde esta entidad se afirma que por ser un alimento libre de gluten resulta ideal para personas con enfermedad celíaca, una condición del sistema inmunitario en la que las personas no pueden consumir gluten porque afecta su intestino.
Tips para incluir las semillas de chía en tu dieta
- Estas no requieren un método de preparación.
- Se pueden agregar o espolvorear sobre todo tipo de preparaciones.
- Preparar con ellas jugos, batidos, ensaladas y salsas.
- Estas no alteran el sabor de los alimentos, solo la textura.
- En el desayuno, puedes mezclarlas con yogur.
- Inclúyelas en las masas para pan.
- Espolvoréalas sobre la avena o el cereal.
- En el almuerzo o cena, incorpóralas en la miga de pan para los apanados.
- Agrégalas a tus jugos favoritos.
¿Qué cuidados debes tener al consumir semillas de chía?
En general, las semillas de chía pueden ser consumidas por cualquier persona. La dosis diaria recomendada en adultos es de entre 13 y 15 gramos (dos cucharadas), mientras que en niños no debe sobrepasar los seis gramos. Sin embargo, ten en cuenta estas recomendaciones antes de incluirlas en tu dieta:
- Asegúrate de no ser alérgico. Las personas alérgicas a los frutos secos y a las semillas en general pueden serlo también a las semillas de chía.
- Como tienen una gran cantidad de fibra, agrégalas gradualmente a tus comidas para que tu cuerpo se acostumbre.
- Evita consumirlas de forma directa. Hidrátalas primero en agua para que absorban el líquido y se expandan.
- Consulta al médico o nutricionista si las puedes consumir en caso de que estés en un tratamiento médico, vayan a hacerte una cirugía o si sufres hipertensión, diabetes, colesterol alto o diarrea.
- Si notas alguna reacción a dversa por su ingesta, detén el consumo.
Ahora que conoces las propiedades de esta semilla, su historia y sus posibilidades, ¿te animas a incluirla en tus preparaciones? Si tienes dudas sobre su consumo, consulta con tu médico tratante sobre las formas de incluirla en tu alimentación regular.
Fecha de publicación: enero 14 de 2020.
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