10 tips para entender la dislexia

Conoce diez claves para entender la dislexia: qué es el trastorno, cuáles son sus síntomas y cómo se trata.

Cierra los ojos un momento e intenta recordar cuándo aprendiste a leer y a escribir. ¿Difícil, no? Mientras que para la mayoría de personas estas habilidades se desarrollan de forma muy natural, tanto que desconoce la complejidad de los procesos cerebrales que exigen, para el 10 % de la población mundial que sufre dislexia el asunto es más retador.

Personalidades como el director de cine Steven Spielberg, la cantante Cher y la actriz británica Keira Knightley, y 700 millones de personas más en el planeta con esta condición, se enfrentan cada día a la dislexia como trastorno del aprendizaje que les demanda una concentración muy elevada para reconocer palabras escritas y decodificarlas, ocasionándoles dificultades para adaptarse al entorno social y académico.

Según la organización Dyslexia International, uno de cada diez niños y adultos sufre dislexia, por lo que el trastorno puede estar presente en cualquier familia. Conoce más sobre este en el siguiente decálogo.

1. Lo básico: ¿es la dislexia una enfermedad?

No. La dislexia no es una enfermedad ni un retraso de la mente, tampoco un error de la visión o una lesión cerebral. Es un trastorno hereditario cuyo origen es un déficit de conexión entre las 13 áreas del cerebro usadas para el procesamiento de alto nivel que demanda el lenguaje.

2. ¿En qué consiste el trastorno?

Especialistas concuerdan con que la clave de este trastorno radica en lo difícil que es para una persona asociar el sonido de una letra con su escritura y, por ende, combinar sonidos para formar palabras. Esto genera que los disléxicos reemplacen letras con otras parecidas, las omitan o añadan sílabas a una palabra.

3. ¿Cuándo preocuparse por la dislexia?

Es usual que padres y profesores confundan este trastorno con irresponsabilidad, ignorancia o rebeldía. Sin embargo, la dificultad que representa la lectoescritura para un disléxico es comparable con la sensación de quien debe leer un texto en japonés dominando únicamente el español. Ante esto, el cansancio, la distracción y el rechazo general frente a la lectura y la escritura, resultan ser una respuesta normal.

4. Primeras señales de la dislexia

Prepara lápiz y papel para hacer un listado de chequeo con las siguientes manifestaciones tempranas de la dislexia. Si de los tres a los cinco años al niño se le dificulta articular palabras o pronunciarlas, tiene falta de control sobre las tijeras o apuros para memorizar números y días de la semana, debes estar muy atento respecto a cómo evoluciona la situación.

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5. ¿A qué indicios hacerles seguimiento?

Si entre los seis y los once años el niño confunde la derecha con la izquierda, altera el orden de las letras en una palabra o las escribe al revés, si su motricidad es regular y tiende a caerse, si se traba al leer en voz alta o rimar, y hace demasiada presión sobre el papel con el lápiz, debes buscar ayuda profesional que permita confirmar o descartar sospechas de dislexia.

6. Es hora de diagnosticar la dislexia

A partir de los doce años la dislexia se hace más evidente, por lo que esta es una etapa crucial para su diagnóstico. Si el pequeño malinterpreta la información que lee, tiene mala ortografía, muestra dificultades para ordenar sus pertenencias, ideas o las horas del día; tiene pésima memoria a corto plazo, se le dificultan las habilidades sociales como el diálogo o el debate y evita leer, escribir o realizar operaciones matemáticas, es momento de abrir los ojos.

7. Tratamiento del trastorno

Ninguna dislexia es igual a otra. El tratamiento debe ser personalizado, acorde con la edad y la sintomatología, e impartido por especialistas en trastornos del lenguaje y audición, como los logopedagogos. Diagnosticar la dislexia antes de los nueve años permite mitigar los síntomas hasta desaparecerlos, mientras que hacerlo más tarde prolonga el tratamiento debido a la profundidad de las secuelas emocionales del paciente, como inseguridad y baja autoestima.

8. ¿Cómo fomentar el aprendizaje de alguien con dislexia?

Las áreas del cerebro que se activan durante el proceso de lectura de un disléxico son diferentes a las tradicionales. Como los procesos de aprendizaje del sistema educativo continúan cimentados principalmente en leer y escribir, es importante que la persona realice, en el aula de clase o en su tiempo libre, diversas actividades multisensoriales que le ayuden a desarrollarse de manera satisfactoria y feliz.

9. Apps para la dislexia

La tecnología ha permitido crear juegos lingüísticos y de atención virtuales que posibilitan la detección de la dislexia hasta en 15 minutos, entre ellos, Dytective, de Samsung, y Change Dislexia. Otras aplicaciones que apoyan la superación de este trastorno son Voice Dream Reader, First Then Visual Schedule y News-O-Matic.

10. La dislexia puede ser el comienzo del éxito

Tildado como tonto y perezoso desde el tercer grado cuando se le manifestó la dislexia, y rechazado por todas las universidades a las que se presentó a causa de sus bajos resultados en el examen de admisión, el empresario Stan Gloss vio los frutos de las creativas estrategias de aprendizaje que desarrolló durante el colegio al convertirse en un exitoso multimillonario, cofundador de la empresa BioTeam.

¿Qué dudas te quedan sobre la dislexia? ¿Conoces algún caso? ¡Cuéntanos en un comentario!

Fecha de publicación: mayo 12 de 2017.
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