La visibilidad, la certificación avalada por la norma colombiana y el diseño son algunos factores importantes a la hora de elegir un casco seguro para motociclistas. Te contamos cómo tomar la mejor decisión.
Según cifras de la Organización Mundial de la Salud, en el mundo mueren alrededor de 1.3 millones de personas en accidentes viales cada año y, de ellas, el 50 % son los actores más vulnerables: ciclistas, peatones y motociclistas. De acuerdo con la misma institución, usar casco puede reducir 69 % las lesiones de cabeza en los motociclistas y disminuir hasta 49 % los traumas mortales. Por esta razón, dicho elemento de protección debe elegirse de acuerdo con varias recomendaciones de seguridad.
Una de ellas es determinar su propósito, pues las características de los cascos varían dependiendo de las necesidades de los usuarios. Por ejemplo: un mensajero que trabaja ocho horas diarias en su moto no tiene los mismos requerimientos que una persona que solo se transporta en ella los fines de semana.
“Las personas prefieren un casco abierto, que no tiene protección frontal, si viven en un clima cálido; un casco abatible, que permite levantar la mentonera, si trabajan en la moto por largas jornadas, o un casco multipropósito, que brinda protección contra el sol y protección ocular, si hacen trayectos largos”, explica Santiago Isaza, funcionario de Inducascos.
Es por esto que, al momento de adquirir este elemento, lo más aconsejable es que los motociclistas acudan a tiendas especializadas para recibir asesoría sobre el producto que mejor se ajuste a sus rutinas y, sobre todo, que cumpla con la normatividad colombiana, la cual exige el uso de cascos certificados (tienen una etiqueta interna que indica el país de origen, el nombre del fabricante, el lote de producción y la norma técnica con la que cumplen) para garantizar la seguridad.
La visión periférica, que le posibilita al piloto captar lo que sucede a su alrededor, y la talla, que se adapta a la cabeza del motociclista para que el casco quede firme, son otros aspectos a tener en cuenta al conseguir un casco. “Es clave que el casco se cambie luego de un accidente o luego de dejarlo caer porque, así no sea evidente, los golpes modifican la estructura interna y los materiales. El visor también se debe mantener en óptimas condiciones para no comprometer la visibilidad”, afirma Isaza. Asimismo:
- El casco debe lavarse internamente con productos de limpieza en seco o paños húmedos. Algunos cascos permiten retirar el acolchado para hacer un lavado más profundo.
- El pinlock es un elemento adicional que se instala en el interior del visor para evitar que se empañe con la respiración.
- Confirma las certificaciones de los cascos en el sitio web www.cascoscertificados.org.
- Para garantizar la visibilidad durante el día y la noche, el visor debe ser transparente.
- Además del casco, hay que utilizar rodilleras, botas, guantes y chaqueta.
Fecha de publicación: marzo 08 de 2021.
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