¿Cómo se coge el volante del carro? Conoce cinco recomendaciones para no perder el control del volante y ser un conductor preventivo.
Una de las reglas de la conducción responsable es la atención al volante del carro. La manera de agarrarlo con tus manos, cómo hagas los giros y no perderlo de vista por distracciones, son factores que influyen en el riesgo de que sufras un accidente de tránsito.
Estas son cinco precauciones que debes tener para no perder el control de la cabrilla y ser partícipe de la movilidad segura en la vía. Te invitamos a leerlas y compartirlas con tus seres queridos. No importa que manejes desde hace mucho tiempo… ¡siempre se puede ser un mejor conductor!
Test para saber si coges el volante del carro adecuadamente
Antes de ver las recomendaciones, respóndete estas preguntas para saber qué tan bien controlas el volante.
- Cuando manejas, ¿qué tanto te preocupas por maniobrar el volante con precisión?
- ¿Prestas más atención a los espejos del carro que a la cabrilla?
- ¿Acostumbras soltar el volante a tu copiloto mientras haces alguna actividad como ver el celular o recoger algo del piso del vehículo?
- ¿En qué posición pones tus manos en el volante cuando manejas?
- ¿Conduces con las dos manos o con una?
- ¿Sacas la mano izquierda por la ventana y sostienes el volante con la derecha?
Cuando mueves la palanca de cambios, ¿dejas la mano derecha sobre esta o la vuelves a poner en la cabrilla? - ¿Qué tan pegado o separado quedas al volante cuando manejas?
- ¿Agarras la cabrilla doblando las muñecas hacia arriba?
Seguramente ya sabes si algunas respuestas que diste no son las más adecuadas. ¿Te quedaron dudas? No te preocupes y sigue leyendo. El conductor preventivo presta toda la importancia al volante y lo coge de forma correcta por dos razones principales: por mejorar las condiciones de seguridad de manejar, siendo esta una actividad riesgosa, y optimizar su comodidad.
Te invitamos a tener en cuenta estas precauciones e interiorizarlas para que la cabrilla no te juegue una mala pasada.
Pon atención a tu postura corporal cuando conduzcas
Asegúrate de sentarte bien y que la distancia entre la silla y el volante sea la adecuada. No es bueno que quedes muy pegado a la cabrilla o que tus brazos estén muy estirados. Lo ideal es que cuando estos la sostengan, formen un ángulo de 120° estando flexionados los codos. Además, ten presente que la silla debe reclinarse formando un ángulo mayor que 90°.
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Las dos manos deben sostener la cabrilla
Cuando se agarra el volante con una sola mano, fácilmente se pierde el control del carro. Si un hueco afecta la dirección del vehículo y no tienes suficiente dominio de la cabrilla, puedes chocarte con un carro o una moto, o irte contra un andén. Las manos deben estar cerradas por completo a lado y lado del volante. Si este fuera un reloj, en las 9 y las 3 (izquierda y derecha respectivamente) para sostenerlo con fuerza, no arriba, abajo o hacia adentro. Los pulgares deben quedar por fuera.
Hacer bien los giros sí tiene ciencia
Estos se deben hacer sosteniendo el volante con ambas manos y no solo con las palmas. Si el giro no es pronunciado, sea a la derecha o a la izquierda, el movimiento de la cabrilla se puede hacer sin cambiar la posición de las manos y solo virándola un poco. En caso de que fuera a la derecha, estando las manos en las 9 y las 3, el volante se debe llevar a las 10:30 y a la 1:30. Para la izquierda es lo mismo, obviamente en la dirección opuesta.
Cuando el giro es pronunciado a la derecha, se debe ubicar la mano derecha en la parte de arriba del volante (a las 12 o 12:30). La izquierda se baja de las 9 hasta las 8 o 7 para ayudar a hacer la fuerza. El procedimiento para girar a la izquierda es igual: lo que hacía la derecha ahora lo hace la izquierda.
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Atención total al volante
Ni se te ocurra soltar la cabrilla y mucho menos dejársela a tu copiloto. Un accidente puede pasar en una milésima de segundo, por lo que cuando la sueltas expones tu vida, la de quienes te acompañan en el carro y la de las demás personas. El volante es el timón del carro y de su estabilidad depende que este no se desvíe.
Relaja tus brazos y maneja de forma segura
Sostener el volante estando demasiado tensionado no solo te genera dolores e incomodidad sino que te resta capacidad de reacción ante imprevistos a la hora de conducir. Maneja con seguridad; agarra la cabrilla con firmeza, pero relajadamente.
¿Te diste cuenta de que no coges el volante correctamente? ¡Cuéntanos en un comentario!
Fecha de publicación: mayo 3 de 2017.
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