La cama se hizo para dormir

Descansar es fundamental para mantener el equilibrio físico y mental. Entérese por qué la cama solo debe ser para dormir.

Hoy todo se puede hacer desde la cama: trabajar en el portátil, hacer tareas, contestar correos, comunicarse con los amigos, ver películas… Ya ni siquiera hay que levantarse y apretar un botón: los mandos encienden el televisor, las tabletas tienen luz propia, el teléfono controla las cortinas o en casas tecnológicas se da simplemente la orden en altavoz y eso que queremos, ocurre.

Aunque sea posible, no quiere decir que sea bueno. Estas son cinco razones por las que la cama solo debe usarse para dormir:

1. Por higiene del sueño. Los hábitos son fundamentales para lograr descansar en forma efectiva, tener horas fijas, estar relajados, disponerse conscientemente para dormir. Cuando se lleva el computador a la cama, sea por diversión o por trabajo, se está promoviendo una alerta, estrés y actividad que no solo no ayudan, sino que interfieren con el sueño.

2. Por cuidado con nuestro reloj biológico. Se ha comprobado que la luz azul que expiden computadores, tabletas y celulares bloquean la liberación de melatonina que es la hormona natural del sueño y, por lo tanto, terminamos completamente alertas cuando deberíamos estar preparando el cuerpo para descansar y recuperarse.

3. Por higiene postural. Al trabajar en la cama se asumen posturas que son penosas para el sistema musculoesquelético. Trabajar en cualquier dispositivo móvil por más de una hora sin soporte lumbar, con todo el peso sobre el sacro, con el cuello doblado hacia adelante con la cabeza flotante, o con los brazos y manos suspendidas o en ángulo, seguramente va a causar dolores.

4. Por un buen manejo temporal. Una vida en equilibrio significa hacer cada cosa en su lugar y tiempo. Dedicarse al trabajo en los horarios de trabajo, dejar espacios para la pareja y la familia, separar unas horas para el deporte, darle un instante a la espiritualidad. Procastinar durante las horas laborales porque “lo hago en casa, antes de acostarme”, es simplemente aportar desorden, estrés y caos a la propia vida. Trabajar en la cama resulta poco recomendable para procastinadores y adictos al trabajo.

5. Por respeto a la pareja. Quienes tienen pareja deben tener en cuenta que tanto la luz que refleja la pantalla del computador como el ruido del tecleado, una cantidad de papeles regados por todos lados o peor aún, la falta de atención y aislamiento de la otra persona pueden generar molestias y barreras. El hogar no debería ser el sitio de trabajo, y la cama, menos.

Los afectados al trabajar en la cama

Cada mala postura afecta el sistema musculoesquelético de diferente forma. Algunos grandes afectados:

• Cervicales y muñeca.
• Estrés en las cervicales y en las muñecas.
• Cansancio ocular por mala postura y estrés de muñecas por el ángulo inclinado de las manos.
• Toda la espalda, muñecas y cervicales en posición comprometida.
• Dolor lumbar, cervical y estrés de antebrazo y muñecas.

Si es inevitable trabajar en la cama, se recomienda:

• Estar sentados, sobre la cadera (no sobre el coxis), con la espalda recta, apoyada en el respaldo de la cama o la pared.
• Utilizar una mesita de cama y apoyar los codos y brazos de forma que las muñecas estén rectas cuando se trabaje.
• Una almohada lumbar y otras almohadas bajo las piernas pueden ayudar a relajar la tensión muscular.
• Limitar el periodo de trabajo en cama a máximo treinta minutos o hacer cambios posturales. Evitar en lo posible trabajar desde la cama.

¿Eres de los que trabaja en la cama?, ¿toma precauciones para hacerlo? Déjanos tus comentarios.