Guía sobre los medicamentos

Al aumentar la edad, también aumentan los medicamentos que ha utilizar. Aprenda a tomarlos de forma adecuada para obtener buenos resultados.

La pastilla para controlar la presión, la del colesterol, el calcio, el hierro contra la anemia y el antiácido para el estómago son algunos de los medicamentos necesarios para mantener la salud o controlar la enfermedad cuando pasan los años y con estos, puede aumentar los riesgos de interacciones. Consejos para disminuirlos:

1. Informarse

• Tener claro qué patologías se padecen y para qué sirve cada medicamento.
• En qué momento tomarlos. Hay unos que deben tomarse en ayunas para que el cuerpo pueda asimilarlos, otros después de las comidas porque son “fuertes” para el estómago y algunos más antes de dormir porque se asimilan mejor durante el sueño.
• Si se utilizan medicamentos que requieren dispositivos médicos (insulinas, inhaladores) hay que aprender a manejarlos correctamente para garantizar que cumplan su función.

2. Tener horarios

Establecer horarios para los medicamentos es una de las mejores medidas para garantizar que funcionen bien y que no haya riesgo de interacciones con ellos. No se deben tomar en grupo (cuatro en la noche, cuatro en la mañana) porque el riesgo de que los efectos se crucen es mayor. Por ejemplo, la levotiroxina (contra el hipotiroidismo) y el omeprazol (para la acidez estomacal) deben consumirse en ayunas y no juntos porque el omeprazol evita que la levotiroxina se absorba, por lo que se recomienda dejar un espacio de una hora entre la toma de uno y otro.

Hoy no hay excusa para no tomarse el medicamento a tiempo, aunque sean muchos y sea difícil recordarlo, las alarmas de los teléfonos celulares y aplicaciones como Medisafe, MedHelper y Dosecat ayudan a no olvidarlo. Si no es experto en tecnología un nieto, sobrino o familiar lo puede configurar y enseñarle a manejarlo. Si la memoria no es como antes, un familiar o la persona que acompaña al paciente debe conocer sus necesidades médicasy ayudarle a recordar qué tomar y cuándo.

3. Cuidar la dosis

Si olvidó tomar una pastilla, en la próxima toma no debe ingerir dos. Cuando se toman los medicamentos a tiempo sus niveles se mantienen estables en el cuerpo y esto muchas veces es lo que necesita para que el tratamiento sea efectivo. La clave es no saltarse ni una toma, no duplicarlos, no aumentar la dosis ni disminuirla.

4. Prestar atención a cualquier reacción

Si olvidó tomar una pastilla, en la próxima toma no debe ingerir dos. Cuando se toman los medicamentos a tiempo sus niveles se mantienen estables en el cuerpo y esto muchas veces es lo que necesita para que el tratamiento sea efectivo. La clave es no saltarse ni una toma, no duplicarlos, no aumentar la dosis ni disminuirla.

5. No automedicarse

Las bebidas “naturales” (hierba de San Juan, toronja o un juego de arándano) tienen interacciones con muchos medicamentos, al igual que el antigripal o la pastilla que le recomendaron. Pregúntele al médico de cabecera cómo tomar los medicamentos y qué puede usar en caso de gripa, un dolor o una molestia estomacal. Nunca recomiende lo que usted toma a otros, pues aunque le funcione muy bien a usted, para otra persona puede ser fatal.

6. Si no pasa la pastilla

Cuando hay problemas de deglución o la persona no quiere tomarse la pastilla, puede partirse o triturar siempre y cuando no se especifique lo contrario en su empaque, como ocurre con los medicamentos de liberación prolongada.

Si las tabletas son muy grandes o amargas, un truco efectivo y que no altera el medicamento es recubrirlas con miel, esto disimula el sabor y facilita la deglución. En caso de una condición grave de deglución, el médico valora la administración del medicamento en otra presentación o por otro vía, sea jarabe, subcutánea o intramuscular.

7. Si no pasa la pastilla

Los medicamentos pueden verse afectados por la luz, por la humedad, por los cambios de temperatura y algunos, simplemente, por el contacto con el aire. Por eso, es importante tenerlos en un lugar adecuado para que conserven sus propiedades:

• Evite guardarlos en el baño, en la cocina o en el vehículo, pues suelen ser muy húmedos o muy calientes.
• En la nevera guarde solo los medicamentos que lo requieren, pero no los ponga en el congelador o en la puerta de esta porque pueden dañarse.
• Si hay que desplazarse, los mejores sitios para guardarlos son el bolso o un bolsillo de la chaqueta.
• Los pastilleros ayudan a organizar los medicamentos, pero tenga en cuenta: dejarlos en su blíster original porque es su mayor protección; no utilizar pastilleros de más de una semana porque los medicamentos pueden modificarse con el paso del tiempo fuera de su caja y los últimos que se tomen pueden estar alterados.

8. Tomarlos con agua

Los medicamentos, incluyendo las vitaminas, siempre deben tomarse con agua y si es un vaso completo mejor, porque facilita la disolución en el estómago, a menos que haya una indicación médica diferente. Nunca los tome con el “traguito de chocolate o de café con leche”, pues ambos tienen compuestos químicos que pueden alterar los medicamentos, su absorción o interactuar con ellos.

Fuente: Cindy Arrubla Valencia. Química farmacéutica.