Cuidado con la influencia de las dietas detox

Consumir batidos, quemadores de grasa y alimentos para desintoxicarse y bajar de peso es una tendencia cada vez más común en las redes sociales. Seguir estos estrictos planes alimenticios sin consultar con un especialista puede poner en riesgo tu salud.

Basta con escribir la frase “dieta detox” en Google para encontrar más de once millones de resultados de páginas de entretenimiento, actualidad y deportes. ¿Qué tienen en común todos estos contenidos? Que no todos cuentan con un respaldo médico.

Las redes sociales se han convertido en la vitrina de cientos de personas que, por su cantidad de seguidores, son considerados influenciadores. Las publicaciones sobre salud y nutrición son recurrentes en algunos de estos perfiles, especialmente las que hablan de dietas desintoxicantes que prometen resultados milagrosos en poco tiempo y con un esfuerzo mínimo.

Aunque existen diferentes formas de llevarlas a cabo, la mayoría restringen el consumo de alimentos sólidos y reemplazan las porciones habituales por sopas y jugos preparados con frutas y verduras, dejando por fuera proteínas y lácteos.

A continuación encontrarás algunas recomendaciones para que consumas estos contenidos con sensatez y selecciones solo aquella información que de verdad tiene valor para tu salud.

Es importante saber que gran parte de los productos y servicios de los que hablan estos influenciadores son contenidos pautados y, en ocasiones, engañosos por no contar con ningún tipo de aval médico. Si sigues este tipo de redes, debes asumir sus recomendaciones con criterio y teniendo en cuenta que existe una finalidad comercial de por medio.

Recuerda que no todo lo que te muestran los influenciadores en sus perfiles es real. Por eso evita compararte o frustrarte por no verte como ellos. Aunque su estilo de vida saludable puede ser una inspiración, trata de no verlo como un modelo replicable porque no está creado a tu medida.

Creer que el cuerpo humano funciona como un dispositivo electrónico, al que basta con reiniciarlo para que regrese a un estado deseado, es una fantasía que prometen las dietas desintoxicantes.

Ten presente que cuando tu cuerpo está sano es capaz de eliminar naturalmente las toxinas y sustancias dañinas a través del hígado, el riñón y el intestino, que también se encargan de mejorar el desempeño de las demás funciones del organismo.

Los planes de alimentación no son una fórmula que se pueda replicar masivamente. Así mismo sucede con las necesidades de desintoxicación, estas son individuales, pues no todas las personas requieren limpiar su cuerpo. Debes tener en cuenta tu edad, tus antecedentes clínicos y los objetivos que te propones para mejorar tu estilo de vida. Además, solo un profesional de la salud puede guiarte correctamente en el proceso de depuración.

Si deseas cambiar tu composición corporal, la recomendación es que adaptes un estilo de vida saludable, en el que, guiado por un nutricionista o dietista, elimines paulatinamente elementos tóxicos como químicos, edulcorantes, gluten, azúcares y embutidos. Solo de esta forma limpiarás tu cuerpo y obtendrás resultados favorables, sin sacrificar tu salud.

No todos los organismos están preparados para seguir este tipo de dietas por la deficiencia de calorías y nutrientes esenciales que las caracterizan. Algunas personas pueden presentar síntomas como dolor de cabeza, diarrea, vómito, cansancio, aumento de la ansiedad y apatía.

Las mujeres embarazadas o en etapa de lactancia, los niños, adolescentes y quienes hayan sido diagnosticados con enfermedades crónicas, autoinmunes o que tienen su origen en el sistema endocrino, deben evitar este tipo de dietas.

Recuerda que antes de iniciar cualquier tipo de dieta, debes buscar la asesoría de un nutricionista o especialista que conozca la bioquímica, fisiología y metabolismo del cuerpo.

Fecha de publicación: noviembre 27 de 2019.

Puede que los contenidos más antiguos de la revista 5sentidos en el Blog Seguros SURA no estén actualizados, así que por favor ten en cuenta la fecha de publicación. Gracias por tu comprensión.