Consejos para cuidar a un bebé prematuro

La prematurez es la mayor causa de mortalidad infantil en el mundo antes de los cinco años. Conozca las medidas que debe tomar para prevenir varios problemas y patologías.

La prematurez es la mayor causa de mortalidad infantil en el mundo antes de los cinco años. Conozca las medidas que debe tomar para prevenir varios problemas y patologías.

El conocimiento, la dedicación, el control y mucho amor son la clave para que el bebé prematuro termine de manera efectiva su proceso de formación y desarrollo fuera del útero en las mejores condiciones posibles y así, se aminoren las secuelas. Lo más importante: ¡tener claridad y conocimiento!

Qué es
En condiciones ideales, un niño nace por parto natural después de las 40 semanas de gestación y pesa más de 3.200 gramos.
Es prematuro todo aquel que nace antes de las 37 semanas de gestación (259 días). La Organización Mundial de la Salud clasifica la prematurez así:

1. Prematuro tardío:entre 34 y 36 semanas más 6 días.
2. Muy prematuro:entre 28 y 34 semanas.
3. Extremadamente prematuro:menos de 28 semanas.

Los norteamericanos añaden el término de muy bajo peso al nacer al bebé (menos de 1.500 gramos). Y peso extremadamente bajo (menos de 1.000 gramos).

Por qué ocurre
Entre los factores que influyen en el nacimiento pretérmino se encuentran:

• La edad materna, menor de 18 años o mayor de 40 años.
• Enfermedades crónicas no controladas en la madre como hipertensión arterial o diabetes.
• Procesos infecciosos durante la gestación.
• Enfermedad hipertensiva asociada al embarazo.
• Ruptura espontánea de membranas ovulares.
• Factores genéticos que determinen partos pretérminos sin factores conocidos.
• Embarazos múltiples.

Riesgos asociados

En principio, el bebé prematuro tiene las mismas expectativas de desarrollo que cualquier bebé nacido a término, sobre todo si al nacer superaba el kilo de peso, pero cuanto más pequeño e inmaduro y si no se atiende correctamente, mayores son los riesgos de enfermedades y complicaciones relacionados con:

• Disminución de la agudeza visual o ceguera.
• Sordera.
• Problemas de motricidad, hemiparesias, hemiplejías.
• Deficiencias inmunitarias.
• Problemas de conducta.
• Hiperactividad o déficit de atención.
• Autismo.
• Problemas cardiacos o respiratorios.

Los primeros mil días de vida son la base para que cualquier bebé sea un ser humano competente y feliz.

Qué se debe hacer
Estos problemas se pueden disminuir con una atención oportuna y un adecuado acompañamiento de un equipo interdisciplinario entrenado y comprometido en el manejo de estos niños. Además de la dedicación y el amor que deben estar presentes por parte de los padres y cuidadores.

Si el niño nace con problemas médicos de base, como incapacidad de respirar solo y necesidad de oxígeno, inmadurez extrema o apneas frecuentes, es importante que esté en una unidad de cuidados neonatales donde se le brindará la asistencia necesaria. Cuando el pequeño se encuentra en una condición médica estable, ya la madre y la familia son las personas indicadas para su cuidado en casa.

Hoy en día se tiene claro que el método Madre Canguro es la mejor forma de ayudar a que el pequeño prematuro estable se desarrolle en las mejores condiciones y reciba sus requerimientos en cuanto a calor, lactancia materna, protección frente a infecciones, estimulación, seguridad y amor. El contacto piel a piel, los masajes y las caricias hacen lo que la medicina y la tecnología no pueden lograr.

Hay que tener en cuenta varios aspectos en el cuidado de este nuevo ser para que logre salir adelante de la mejor manera:

1. Higiene

Los bebés prematuros por lo general no han desarrollado su sistema inmune y por lo tanto pueden contagiarse fácilmente de cualquier virus o bacteria, así que recuerde:

• Lavarse las manos (o aplicarse gel antibacterial) antes de tocar al niño.
• No permitir que se fume delante del bebé y no exponerlo a ambientes contaminados.
• Evitar el contacto con juguetes y objetos con los que puedan haber jugado niños enfermos.
• Evitar los lugares con mucha gente (supermercados, transporte público, guarderías).
• Evitar que se le acerque o los manipule cualquier persona que tenga o haya tenido algún virus o infección reciente.
• Mantener su habitación limpia.
• Cambiar su pañal cada tres o cuatro horas, aunque aún esté limpio.

2. Temperatura

El bebé prematuro tiene menos grasa corporal y por lo tanto debe cuidarse que no esté en ambientes muy fríos. Tampoco se considera adecuado que se encuentre demasiado abrigado porque es un esfuerzo extra para su organismo reducir su temperatura corporal. Lo ideal consiste en que la habitación esté entre los 21 y los 24 grados centígrados. El mejor método para mantener su temperatura corporal es el de Madre Canguro, ya que se ha comprobado que estos niños rara vez sufren de hipotermia.

3. Respiración y bienestar

El ritmo respiratorio normal de un recién nacido prematuro y con bajo peso al nacer oscila entre 30 y 60 respiraciones por minuto, estas pueden alternar con pausas cortas de 4-6 segundos, si estos intervalos se vuelven muy largos (10-15 segundos) o los labios o el rostro se tornan azules, puede estar ocurriendo un ataque de apnea y hay que actuar con celeridad, pues a mayor duración, mayor riesgo de daño cerebral. La madre puede estimular al bebé frotándole suavemente la espalda o la cabeza y meciéndolo hasta que comience a respirar de nuevo. Si la apnea continúa se debe buscar ayuda. El método de la Madre Canguro ha demostrado regular el ritmo respiratorio y disminuir estas apneas, que si aparecen en una fase tardía pueden indicar el inicio de una enfermedad o infección.

4. Alimentación

Hoy en día no existe duda de que la mejor alimentación posible para un recién nacido, especialmente en el caso de los prematuros, es la leche materna. Esta le aporta todos los nutrientes necesarios para que se desarrolle adecuadamente y además le ayuda a desarrollar y fortalecer su sistema inmunológico (sus defensas). La lactancia de un bebé prematuro puede parecer difícil, pero con una asesoría apropiada se puede lograr que se amamante y reciba de la madre la leche que requiere. El programa de Lactancia de Sura puede ser una ayuda invaluable en este aspecto.

5. Vacunas

Los bebés nacidos pretérmino no solo tienen un sistema inmunológico inmaduro, sino que poseen menos anticuerpos de origen materno. Por lo tanto necesitarán las mismas vacunas que todos los bebés y posiblemente algunas adicionales para protegerlos de infecciones respiratorias y digestivas que son las más comunes en ellos. Es recomendable, además, que la familia y todos los que estén cerca se apliquen la vacuna contra la gripa y la tosferina.

6. Sueño

Los recién nacidos pueden dormir entre 16 y 18 horas. Un bebé pretérmino puede dormir incluso más, se recomienda en la primera etapa de cuidado, despertarlo cada dos horas para alimentarlo, de forma que se garantice una adecuada ganancia de peso y evitar hipoglicemias.

7. Estimulación

Es fundamental una estimulación adecuada para ayudar a que su sistema nervioso y sus sentidos se desarrollen satisfactoriamente. Lo primero es el contacto piel a piel, efectivo en todos los sentidos, desde su sistema inmunológico hasta su maduración cerebral. En esto el método Canguro resulta ideal.

Poner un móvil sobre la cuna que pueda seguir con los ojos, poner música instrumental suave, hablarle, estimularlo para que agarre un dedo a fin de que estire las manitas son grandes inversiones con muy poco esfuerzo. Los masajes también han demostrado ser especialmente beneficiosos para los bebés prematuros.

8. Crecimiento y desarrollo

Un bebé prematuro debe estar supervisado, especialmente durante su primer año de vida, para garantizar que está logrando un desarrollo y crecimiento normal, para detectar cualquier síntoma de sordera o ceguera, cualquier dificultad motriz, neuronal o en su sistema respiratorio. Lo que se busca hoy en día es hacer un diagnóstico temprano para intervenir rápidamente, prevenir lo que se pueda prevenir, mejorar lo que se pueda mejorar y darles el mejor prospecto de vida.

Se estima que 10% de los nacimientos corresponde a bebés prematuros o de bajo peso al nacer. Con una adecuada atención durante su primer año de vida se pueden prevenir muchos problemas y patologías.

Beneficios del Método Canguro

• Eficaz para controlar la temperatura y puede asociarse a la reducción del riesgo de hipotermia.
• Los ritmos cardiaco y respiratorio, la oxigenación, el consumo de oxígeno, la glucosa en sangre, los patrones de sueño y el comportamiento de los recién nacidos prematuros o con bajo peso al nacer con los que se ha mantenido contacto piel a piel tienden a ser mejores que los de los recién nacidos separados de sus madres.
• El cortisol salival, un indicador de posible estrés, es inferior en los neonatos con los que se ha mantenido contacto piel a piel. La frecuencia de llanto es menor.
• Hay menor riesgo de que se broncoaspiren o se les devuelva el vómito.
• Menor riesgo de que hagan apneas o se les olvide respirar.

Programa Bebé Canguro de Sura

SURA cuenta hace veinte años con “Bebé Canguro”, un programa en el que se presta una atención multidisciplinaria a los niños prematuros para darles el mejor inicio en la vida. Enfermeras, nutricionistas, pediatras, terapistas del lenguaje, psicólogas, fonoaudiólogos y terapistas físicos hacen seguimiento al niño y su familia durante su primer año.

¿Conoce algún bebé prematuro? Comparta estos consejos con su familia para que le den el mejor inicio en la vida.