¿Cómo darle sentido a tu vida? Busca tu propósito

El propósito de vida es la capacidad que tienes de materializar y poner en actos las cosas que sueñas. Te contamos qué es y cómo se conecta con el sentido, el proyecto y la visión de vida.

Hay situaciones en tu vida que te hacen cuestionar tu camino con preguntas como: ¿debo renunciar a mi trabajo y buscar uno nuevo que me apasione?, ¿retiro a mis hijos del colegio y los educo desde casa?, ¿debo dejar la ciudad e irme a vivir al campo?, ¿mi pareja sí es la persona con la que quiero compartir mis días?

Este cúmulo de preguntas, para las que en muchos casos no tienes respuesta, pueden generarte estrés y angustia; y aunque la vida sigue su rumbo, sientes que algo te hace falta. Lo que puede estar pasando es que realmente te estás cuestionando cuál es el propósito de tu vida. Para confirmarlo, primero debes entender qué es. 

Las cuatro bases para buscar tu felicidad

Estos cuatro pilares están conectados entre sí, debes resolverlos por tu cuenta y con las convicciones que viven dentro de ti: 

• El sentido de vida: es la capacidad que tienes de sentir y recibir amor de otras personas y del entorno que te rodea. Está relacionado con tu esencia como ser humano.
• El propósito de vida: son las acciones contundentes y precisas que te permiten tener una ruta crítica para cumplir tus objetivos y metas, y que estas se puedan comprobar y verificar. Se mueve por la felicidad: si vas cumpliendo tu propósito, te sientes feliz en medio de los retos y las dificultades que se presentan en el día a día.
• El proyecto de vida: es la aplicación concreta de los objetivos y metas que te planteas en tu propósito. Te permite evidenciar tu evolución, tu desarrollo y tus logros. 
• La visión de vida: es la imagen que tienes de tu futuro, lo que deseas que se haga realidad. Te permite ver, con el paso del tiempo, cómo potencializar tus habilidades y competencias.

 ¿Para qué te sirve tener un propósito en la vida?

Este te permitirá lograr cinco resultados que son claves para cualquier persona: 

• Salud física y emocional: al estar en paz con tu pasado y vivir el presente, podrás cuidar tu cuerpo con buena alimentación y actividad física.
• Bienestar financiero: te permitirá establecer una relación sana y consciente con tu economía para cumplir tus sueños.  
• Relaciones interpersonales sanas: con las herramientas necesarias para resolver de forma asertiva los conflictos.
• Capacidad de adaptarte y disfrutar de la vida: esto hace referencia a sentirte cómodo y contento con tu presente, haciendo las cosas que quieres y agradeciendo por ello.
• Disfrutar de paz interior y exterior en tus acciones: que la claridad te acompañe en cada una de tus decisiones para lograr tu proyecto de vida.  

No tienes solo un propósito durante toda tu vidaSegún David Allen, experto en productividad personal y uno de los teóricos que más ha estudiado este concepto, los propósitos de tu vida varían según el medio en que te desenvuelves, las personas que te rodean, tu edad y las situaciones por las que estás pasando. Es importante que tengas en cuenta que solo tú puedes definir tu propósito, pues se trata de un asunto totalmente personal. Los otros son importantes, pero no puedes definirlo pensando en lo que ellos quieren que hagas, sino en lo que de verdad quieres para tu vida. 

¿Cómo tomar la decisión de tener o cambiar un propósito de vida?

Ese es un paso muy importante. No solo implica que tengas claro el sentido, el propósito y el proyecto de tu vida. Debes tener el carácter y la fuerza interior para ser capaz de tomar la decisión acertada en un momento dado. Asegúrate de que tu decisión cumpla estas dos condiciones:

• Que la tomes mirando todas las posibilidades y opciones que te plantean.
• Que lo hagas en absoluta paz interior. Y lo absoluto no se negocia: si la tomas en un momento en que no estás en control de tus emociones para mirar de manera racional tus opciones, el resultado no va a ser el esperado y puede tener consecuencias negativas.

Recuerda que el propósito de vida es un trabajo, una construcción y depende de tu voluntad, tu carácter, tus acciones, de no darte por vencido, de quienes te rodean, de la posibilidad que tengas de ir cumpliéndolo y de la capacidad de interpretar los retos como oportunidades y no como dificultades.

Fuente: Catalina Arcila, sicóloga y consultora de SURA en los programas Saludables, Plenamente y Prerretiro.

Fecha de publicación: abril 16 de 2021.

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