Trabajo independiente con responsabilidad: compromiso de todos

Laborar sin ninguna vinculación contractual te trae numerosas responsabilidades y desafíos ante el presente y el futuro. Entre ellos, seguir vigente en el mercado y que tu trabajo sea rentable y sostenible.

Para lograrlo, como independiente debes ser metódico, organizado y con alta capacidad de autogestión de cada uno de los retos derivados de tus actividades productivas.

Superar los desafíos implica que te cuides de enfermedades con el fin de evitar complicaciones. Además, y para que tengas un respaldo, es clave que cotices a la seguridad social y seas consciente de la importancia de prevenir accidentes o enfermedades laborales a consecuencia del trabajo, lo cual significa que adquieras el hábito de evaluar los riesgos del entorno y tomes medidas para que estos no se materialicen.

Pasos para que adoptes el hábito de evaluar los riesgos laborales

• Determina una forma segura de llegar al sitio de trabajo (si se requiere que te desplaces), la ropa que debes usar según el clima, el equipo de protección personal y herramientas que necesites, entre otras condiciones. Para que no olvides nada, ten una lista de chequeo y complétala.

Cuando llegues a tu lugar de trabajo:

• Dependiendo de la labor, identifica en el entorno si hay animales o mascotas, cables eléctricos cercanos o sueltos, desniveles o estructuras en mal estado. Si el trabajo es a la intemperie, evalúa factores como el tráfico o si hay estructuras con filos o partes puntiagudas para que asumas los cuidados pertinentes.
• Pregúntate qué tanto te puede afectar un riesgo y cuáles consecuencias afrontarías en caso de que se materialice. Si la respuesta es mucho o muy graves, respectivamente, notifica al contratante para que, en conjunto, apliquen correctivos. Una vez listos, vuelve a analizar la situación.
• Utiliza el equipo de protección personal y demás instrumentos que requieras en favor de tu seguridad. Mantente alerta frente a lo inesperado y asegúrate de conservar en orden y bien iluminado el espacio de trabajo.
• Ejecuta tus actividades con tranquilidad y saca tiempo para descansar y no fatigarte ni perder la concentración. Aliméntate de manera balanceada.

Si el trabajo es en una oficina o si cada día es en un lugar distinto:

• Si reconoces condiciones que pueden generarte un accidente o enfermedad, ajústalas.
• Sé consciente de tu postura y verifica que te sea sencillo realizar movimientos con soltura. El objetivo es que no tengas que tensionar la parte musculoesquelética.
• Haz pausas activas que te permitan descansar y aliméntate con responsabilidad. Consume snacks entre comidas.

Prevenir accidentes y enfermedades laborales es tarea de todos. Con buenos hábitos, podemos construir entornos más seguros y saludables.

Fecha de publicación: agosto 8 de 2022.