Varias culturas han contribuido al desarrollo del libro, desde sus inicios en Mesopotamia hasta la evolución del formato impreso al e-book.
El libro ha recogido el conocimiento de diferentes culturas durante miles de años. En el año 3000 a. C., en la antigua Mesopotamia, los primeros soportes de la escritura fueron placas de arcilla, madera, marfil, metal y otros materiales. Mil años después, los egipcios desarrollaron el primer sistema alfabético e implementaron las tintas y el papiro.
Luego apareció el pergamino y se dio el desarrollo tecnificado del papel por parte de los chinos, así como la apropiación de este en otras culturas y su auge en Europa, continente en crecimiento y consolidación económica.
Ese contexto maduró la imprenta de Johannes Gutenberg, a quien se atribuyó el invento en 1440. Esta impulsó la producción a gran escala de títulos que propagaron el conocimiento, primero entre minorías privilegiadas y luego entre el grueso de la población tras el acceso masivo a la educación. En la segunda mitad del siglo XX apareció internet y, con él, una revolución tecnológica que condujo el libro a la digitalización.
A continuación, un repaso por los momentos más importantes de la historia del libro, una de las creaciones más importantes en la historia de la humanidad dada su condición de transmisor del conocimiento.