Las Pymes se suman a la tendencia de empresas B
Blog

Las Pymes se suman a la tendencia de Empresas B

4 agosto 2022 Salud Planetaria

Cuando el ser humano comenzó a poblar el planeta y a extraer sus recursos naturales para poder subsistir, jamás se preguntó sobre el futuro. Monarcas, dinastías y revolucionarios buscaban dejar su huella en los libros de historia, sin pensar en cuál era la huella que estaban dejando en la Tierra. 

Hoy, siglos más tarde y en un despertar ambiental también conocido como “conciencia verde”, la raza humana se da cuenta que ha dejado más marca en la tierra que en los libros. Y es que fue tal el avance, la optimización de recursos y los descubrimientos naturales, que el planeta tierra ha sufrido consecuencias.

Gobiernos, empresas e individuos son conscientes del impacto que generan y cómo su huella de carbono afecta al planeta. Es por eso que, desde su lugar, cada organismo ha elegido tomar el camino de la responsabilidad ambiental, informarse y modificar hábitos con el fin de reducir las emisiones de gases, la producción de residuos y la contaminación, entre otras cosas. Es así como nacen las Empresas B, empresas que buscan ser transparentes y medir su impacto socioambiental. 

Qué implica ser una Empresa B

Ser una Empresa B implica asumir un compromiso de mejora continua para con el ambiente y las personas. Para esto, miden y analizan cinco áreas de su negocio: gobierno, trabajadores, clientes, comunidad y medio ambiente. El foco está puesto en identificar los puntos que pueden mejorarse, los desafíos por venir y su potencial como agentes de cambio desde el sector privado. Si bien cualquier empresa puede obtener su Certificado B, hay varios aspectos a tener en cuenta.

B Lab es una entidad sin fines de lucro de los Estados Unidos y la encargada principal de reconocer y entregar las certificaciones de Empresa B. Para esto, revisarán que las empresas postulantes operen en un mercado competitivo, tengan doce meses de operaciones, sean un negocio que se encuentre generando ingresos y se distinga por la forma en que presenta su producto o servicio. 

Andrés Rave, Director regional de soluciones para empresas de Seguros SURA, asegura que “ahora la empresas B se plantean más como una visión de negocio que entiende sus consumidores, cada vez más conscientes, demandan y valoran atributos como el impacto social y ambiental detrás de cualquier bien o servicio”.

Las Pymes se suman a la tendencia de empresas B

Mientras que popularmente se creía que este sello le pertenecía a las grandes empresas -por el desafío y la profundidad del proceso-, el director regional de soluciones reconoce: “Las Pymes, que siempre han liderado los proceso de innovación, se suman también al desarrollo de tecnología y modelos de negocio no sólo centrados en el resultados financiero sino también en el beneficio social y ambiental de sus propuestas”. 

Es por ese motivo y el hecho de que cada vez más países tienen el objetivo de responsabilizarse por su impacto ambiental, que en la región de América Latina y el Cariba hay más de 700 empresas con Certificado B (varias de ellas también reconocidas como “Best for the World”). 

El impacto es tal, según Rave, que “no existe ahora una innovación o un proyecto que no contemple estos atributos cómo parte de su proceso de desarrollo. Y más allá del certificado de empresas B es una demanda genuina del mercado”.

Debido a las formas de consumo, las nuevas tecnologías y la conciencia ambiental a nivel global, las empresas (a gran escala y las PyME) se han visto a prueba: cambiar su modelo de negocios y propuesta para alinearse con las nuevas demandas socioambientales. 

Las Pymes se suman a la tendencia de empresas B

Empresas como 10Pines (tecnología), 3 vectores (diseño), Albertina (diseño), Acción verde (agricultura) y AdClean (producto) son algunas de las tantas empresas latinoamericanas con certificación B que demuestran que a pesar de los distintos rubros y objetivos profesionales, es posible generar un impacto positivo tanto a nivel social como ambiental. 

Transformaciones coordinadas

Las problemáticas medioambientales asociadas a las nuevas formas de consumo han contribuido a que se instaure en los mercados una mirada muy diferente de la competencia y de las estrategias de diferenciación e innovación de las marcas.

Según explican expertos de Tendencias y Riesgos SURA, el objetivo ahora se empieza a centrar en acciones como hallar en conjunto soluciones y transformaciones inteligentes e innovadoras que mejoren los materiales y los ciclos de producción, buscar fórmulas y formas más sostenibles para utilizar los recursos, conocer la trayectoria durante el ciclo de vida de los productos, cuál será su disposición final y su impacto, mejorar la eficiencia en el día a día de las personas y solucionar los daños ya causados en el medio ambiente.

La conciencia de tener que afrontar retos comunes a todos (como el cambio climático) ha conducido a que las empresas vean en la coopetencia, en la biomimética y en soluciones basadas en la naturaleza, oportunidades para seguir innovando en conjunto que disminuyan los impactos ambientales en el desarrollo de nuevos productos y servicios.