Cómo enseñarle a mis hijos a administrar su dinero

El dinero no es malo ni bueno en sí mismo. Hace siglos que el ser humano acordó métodos de pago para realizar transacciones y, desde entonces, las monedas de los países se han vuelto un instrumento de uso cotidiano. Sin embargo, muchas personas desarrollan un mal vínculo con esta herramienta, e incluso sufren al utilizarla y al tomar decisiones sobre ella. 

Los expertos explican que, al igual que ocurre con otros aspectos de la vida financiera, la relación de una persona con el dinero puede aprenderse y moldearse según las necesidades. La creación de hábitos alrededor de este activo es posible, aunque lograr su correcta implementación de forma constante lleva tiempo y disciplina. Por ese motivo, se recomienda a los padres que eduquen a sus hijos sobre la administración del dinero desde pequeños. 

“Un buen contexto para enseñarles a los niños del buen uso del dinero puede estar apalancado en el trabajo”, explica Maricella Álvarez, Subgerente de Experiencia y Relacionamiento Clientes en SURA. Y agrega: “Esto es hacerles ver que, para poder tener dinero, para mantener una familia y una casa, se requiere de esfuerzo por parte de los adultos, que se retribuye con un sueldo o salario. Esto está asociado a entregar tiempo, conocimiento intelectual y, en ocasiones, esfuerzo físico”.

En esa línea, la experta señala que “lo segundo a tener en cuenta es la transmisión de conocimiento de una forma ilustrativa”. “Así, será más sencillo que entiendan que el hacer un buen uso del dinero permite tener alimentación, vestimenta, educación, una casa y hasta darse unos gustitos si es posible”, subraya Álvarez. 

Herramientas pedagógicas para enseñar a niños sobre el dinero

La inclusión de material creado por expertos para educar a niños sobre el manejo del dinero es recomendable. De todas formas, eso no significa que sea una obligación. Los especialistas en la materia señalan que durante este proceso nunca hay que olvidar que se trata de infantes que tienen ritmos distintos de aprendizaje. Por ese motivo, lo primordial es desarrollar caminos creativos y didácticos para enseñarles cómo usar el dinero. 

“Una buena forma de ser ilustrativos con los niños es a través de historietas o cuentos que transmitan la importancia del trabajo y de ser una persona responsable con el uso del dinero y los recursos del hogar”, indica la Subgerente de Experiencia y Relacionamiento Clientes. 

Desde la organización internacional Healthy Children, creada por pediatras de todo el mundo y avalada por la American Academy of Pediatrics, destacan la importancia de llevar a cabo un plan en conjunto. “Decidan juntos cómo realizar el seguimiento del dinero de su hijo. Piensen en maneras que se adapten al estilo de aprendizaje del niño”, recomiendan los profesionales de la institución. Y dan algunas ideas para aquellas personas que no saben cómo iniciar este proceso:

• Guarde el dinero en recipientes por separado, como sobres o frascos. Coloque una etiqueta en cada recipiente: Ahorrar, Gastar, Compartir. Su hijo puede disfrutar de personalizar y decorar los recipientes.
• Haga un seguimiento del dinero que ahorra, gasta y comparte cada niño con la ayuda de un cuaderno o una hoja de cálculo. Cada vez que se realiza un depósito o una extracción, revise los saldos. Los padres estarían a cargo de guardar el dinero.
• Cree una tabla con calcomanías. En lugar de darles dinero a los niños más pequeños, cree una tabla y marque el dinero que ganan con calcomanías.

“Una vez que haya decidido cómo realizará el seguimiento de su dinero, decida qué porción aportará a cada categoría. Puede realizar ajustes si es necesario”, afirman en Healthy Children. Y concluyen al respecto: “Recuerde que la administración del dinero es una curva de aprendizaje. Es esperable que se cometan algunos errores en el camino. Al igual que con el desarrollo de cualquier habilidad, el refuerzo positivo es beneficioso. Recompense a su hijo por su trabajo arduo, cuando cumpla sus metas relacionadas con el dinero, y cuando tome decisiones de gastos inteligentes”. 

Los beneficios de aprender sobre el dinero desde niños

Aquellas personas que desarrollan un buen vínculo con el dinero desde la infancia tienen más posibilidades de administrarlo de forma correcta una vez que llegan a la adultez. En América Latina, se acentúa una problemática en este campo. Un ejemplo de esta situación se plasma en el informe del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), donde se revela que el “61 % de las personas en la región no ahorra y, quienes sí lo hacen, ahorran principalmente de manera informal”.

“La educación financiera es esencial en el bienestar de las personas, que está muy ligada a la educación emocional y a los valores”, asegura Juana León Álamo, fundadora y directora de Aprender Cuenta. “Por ese motivo, es mejor adquirir esos conocimientos y habilidades desde muy pequeños para que los buenos hábitos financieros sean una forma de vida”, continúa la responsable del proyecto educativo diseñado para enseñar educación financiera a niños de 5 a 16 años de edad, de forma didáctica y divertida.

Por su lado, Álvarez remarca que “algunos de los beneficios que se logra con esto están relacionados a que los pequeños puedan valorar el esfuerzo que hacen los adultos por entregarles lo mejor para su crecimiento y desarrollo. “Otro beneficio es que ellos comprendan el valor de las cosas, así serán más colaborativos en el hogar, y  aprenderán a ganarse sus propias cosas  a través de metas personales”, suma la especialista de SURA. 

Y concluye: “La principal ventaja es que lo aprenderán paso a paso, de forma natural y simple, con elementos que ellos conozcan y ejemplos que ellos puedan comprender de acuerdo a sus edades. En la medida que ellos vayan creciendo, serán adolescentes más responsables y luego adultos con una mayor capacidad de administrar eficientemente el dinero”. 

La importancia de incluir tecnología

Los expertos indican que en un mundo cada vez más digital, el cual los niños dominan desde etapas muy tempranas, el uso de la tecnología es imprescindible. Por ese motivo, durante los últimos años, se crearon plataformas que aportan a esta formación. Uno de los casos más destacados es el de Savings Spree, app que ganó el Parent’s Choice Award en la categoría de aplicaciones móviles.

“Savings Spree es un juego educativo que tiene como objetivo enseñar a los niños el valor del dinero y cómo funciona el dinero. Cada uno de los seis temas se enseña a través de una ronda en un programa de juegos donde el objetivo general es ahorrar”, explican los creadores. Y agregan: “Los niños aprenden sobre cómo ganar o ahorrar grandes cantidades de dinero, y también sobre acciones que ahorran pequeñas cantidades que se suman con el tiempo”. 

Otro ejemplo de este abordaje es FinZi, una fintech creada en Colombia y que dentro del paquete de instrumentos que ofrece incluye un servicio financiero para niños y jóvenes entre 10 y 17 años. El mismo realiza un abordaje desde componentes lúdicos de educación y una billetera electrónica.

“En América Latina, el tema de la educación financiera es un gran problema. Es algo que la gente aprende ‘a los golpes’, cometiendo errores, pagando cuotas de manejo o intereses que no esperaba, enfrentándose a una cantidad de cosas que nunca te enteraste de que existían, pero están ahí”, cuenta Juan Zavala, cofundador y CEO de FinZi. Y desde la compañía destacan: “Adquirir una educación financiera desde jóvenes nos permite desarrollar las herramientas que necesitamos para darle un buen manejo a nuestras finanzas personales y alcanzar mayores logros en el futuro”.

En Seguros SURA existe el objetivo de generar información basada en datos reales y testimonios de nuestros expertos. De esta manera, se busca ayudar a padres y niños para que puedan construir un correcto plan de educación financiera relacionada con el dinero. Hacerlo de forma adecuada desde una edad temprana provoca que los infantes puedan tener un mejor contexto económico en su futuro y, en consecuencia, acceder a mejores estándares de calidad de vida.